Carmen nunca pensó en ser manicurista, su sueño siempre ha sido dedicarse a la psicología o a la abogacía. Hoy os vamos a contar cómo gracias a su simpatía y a su gran corazón, Carmen pudo salir de todas las situaciones difíciles que se interpusieron en su camino.
Como sus padres no tenían recursos suficientes, comenzó a trabajar a los 14 años cuidando al hijo de su prima y atendiendo en una tienda de bisutería de un centro comercial. Laboraba desde por la mañana hasta las diez de la noche, así que consiguió el bachillerato estudiando los sábados gracias a un sistema venezolano que les permite sacárselo de esa manera.
A los 19 años, Carmen comenzó a trabajar en un comercio de uñas, debido a su hermana que también trabajaba allí, donde le enseñaron durante 3 meses de prácticas cómo tenía que hacerlo.
DE CAMINO A ESPAÑA
La situación de Venezuela empeoró en gran medida durante los últimos años: desabastecimiento, delincuencia, inseguridad… se vive con miedo.
Tengo un hijo, no quería que siguiese viviendo allí. Yo pasé una infancia dura porque en mi casa no había dinero, pero a pesar de todo fue bonita porque el país no estaba en la situación en la que está ahora . Con mi hijo es lo contrario, yo tenía dinero para que viviese bien, pero el país no le podía ofrecer nada bueno.
Carmen Alcira
Quien la ayudó a venirse fue la madrina de su hijo, que ya vivía en España. La entrada en España fue difícil porque durante algún tiempo tuvo que estar sin papeles, pero gracias al apoyo de sus familiares lo consiguió. Carmen nos cuenta que ha trabajado en peluquerías, limpiando casas, cuidando niños… pasaron 4 años hasta que pudo traer a su hijo a España.
«Pensé que era la misma persona buena que yo conocía»
Carmen acogió en su casa durante casi 2 meses a un amigo suyo de Venezuela que le dijo que quería ir a visitarla. Un día cualquiera, a 18 días de que Carmen fuera a por su hijo a Venezuela, su amigo desapareció. Ella comenzó a llamarlo y se dio cuenta de que había bloqueado sus llamadas; le había robado más de 5.000€ que había estado ahorrando para traer a su hijo a España. En ese momento fue cuando se dio cuenta con quién podía contar. Sus amigas y clientes comenzaron a prestarle dinero para que ella pudiera ir a Venezuela.
Las amistades que yo había cosechado aquí comenzaron a ayudarme, esas amistades que realmente eran mis clientes. Gracias a eso pude costearme el viaje a Venezuela.
Carmen Alcira
A principios de este mes de agosto Carmen consiguió abrir su propio negocio junto a una amiga en Marbella llamado «Cache Nails».
Sus consejos
- Emigrar con la mejor intención, con ganas de trabajar y crecer, sobre todo ser una buena persona.
- Perseguir siempre los sueños que uno tiene porque en este mundo NADA es imposible, lo que tienes es que querer. «Lo que yo he logrado ha sido en base a la constancia, el respeto y la responsabilidad, que es más importante que la inteligencia».
A mí no me gusta que me cuenten las experiencias, me gusta vivir las mías propias. Soy muy cabezota, si me dicen que eso es negro, necesito llegar hasta allí para ver que es negro.
Carmen Alcira
Su inspiración
Carmen admira a su amiga contable Yohelys delpino, que no ha podido ejercer aquí su carrera pero sigue estudiando para ello. También quiere dar las gracias a su hermana Aura Guzmán y a Dayana Guevara, las dos creadoras de uñas, que siempre la han apoyado.
Así que ya sabes, si te pasas por Marbella no olvides pasarte por Cache Nails. Si no tienes ese viaje en mente, siempre puedes contactar con alguna de nuestras otras profesionales en uñas. c